Corresponde a una doceava parte de Fanega y también sirve para medir extensiones o volúmenes.
Si se trata de capacidad, el celemín se utilizaba frecuentemente para medir trigo y equivalía a algo más de 4,6 litros. En el caso de usarse para medir extensiones de tierra, el celemín eran unos 537 metros cuadrados.
Haciendo memoria y jugando un poco con este rico vocabulario ya en desuso, podemos decir que 12 celemines hacían una fanega, por tanto, 6 celemines eran media fanega, también llamada cuarto… además, 5 celemines eran una «hemina » o emina (también la he visto escrita sin h) y 3 celemines eran un cuarto de fanega…
Parece complicado, pero al igual que con el euro, las pesetas, los duros o cualquier medida que se utilice… el uso y la práctica los hacen fáciles y familiares con el tiempo.
Junto con las Fanegas, los celemines o las arrobas, existía una inmensa colección de medidas como las varas, las varas cuadradas, los cuartos, las cuartillas (sobre todo para vino), la cana, media cana, la peonada, la libra castellana, la tahulla, la aranzada, la labrada, un quintal… en fin, la lista es riquísima en nombres y medidas.
He encontrado algunas páginas muy interesantes con una recopilación (bendita paciencia) de la mayoría de estas medidas y su correspondencia en el sistema métrico…
Aunque hace más de un siglo que fueron sustituidas por el actual sistema métrico, la mayoría aún las podéis escuchar si visitáis de vez en cuando vuestro pueblo o el de vuestros abuelos:
La Arroba | La Fanega | La Fanega de puño | Celemín | La Vara | La Hemina | La Cuartilla | El Azumbre | Libra castellana | La Panilla | La Aranzada