Situada en la calle Mayor, en el barrio de San Pedro.
La primera referencia a la Torre del Reloj en un documento antiguo es en un acta capitular de 1609. La Torre participaría de un proyecto urbanístico que tendría como objetivo el desarrollo lineal de la Calle Mayor, es en ese siglo cuando las calles se ensanchan y hay una preocupación por el espacio exterior.
En 1718 se haría una reconstrucción del edificio, casi en ruinas, y dos años más tarde le sucede otro retoque importante.
La Torre presenta numerosas similitudes con el arte islámico, es, por tanto, de estilo neomúdejar. En planta es una torre de 2. 56 m. de lado y con una escalera de caracol en el centro que sube hasta lo alto. En el alzado, llama la atención, sobre todo la geometría en los elementos decorativos, que buscan la elevación. Es una torre modesta, de tres cuerpos encajados uno dentro de otro, disminuyendo su volumen conforme ascendemos en altura. El segundo cuerpo contiene el reloj y el último posee una zona abierta con tres vanos por cara para las campanas, con tejado a cuatro aguas, coronado con una cruz con veleta. La entrada es una pequeña puerta de madera. Como elementos de mampostería se utiliza el ladrillo y la piedra, y el motivo decorativo principal es el almohadillado.